Rodrigo Cuevas: "El 'Cuevas' del escenario es como un 'yo' de anfetas"

Rodrigo Cuevas actúa el 3 de Diciembre en el Teatro Alcalá

El llamado “Fredy Mercury” asturiano cierra en Madrid una exitosa temporada con su espectáculo “Electrocuplé”, una mezcla de cuplé, cabaret con las tonadas y canciones populares de Asturias, fusionado con música electrónica y mucho humor. Y mucho talento.

Rodrigo Cuevas es campechano, viste como un joven de 30 años que es, lleva un jersey rojo de rayas negras y vaqueros, nadie diría que es él, a no ser porque lleva sus pendientes que le identifican allá por donde va, como su pequeño bigote. De la oreja izquierda cuelga una arracada tradicional de filigrana y de Salamanca,  regalo de un antiguo amor.  Y en la derecha, otro pendiente traído desde la India por una amiga.

“Eres igual que Fredy Mercury” le dicen, una vez más.  En la prueba de sonido transmite tranquilidad cantando el “Ritmo de Verdiciu” con las manos en los bolsillos.  La canción suena muy bonita, aunque más tarde se convertirá en preciosa  por las sinergias de su espectáculo, por su vestimenta, por la coreografía... Esta versión renovada de la canción tradicional asturiana con los aires del “Ritmo de la noche” se ha convertido en un hit, que hace transformar al público en una sesión de fuegos artificiales, de alegría, de buen rollo. Y algún@s entre las butacas se han empollado el tutorial que tiene en Youtube para bailar el “Verdicu”. Puede parecer de frikies. O no.

Varias horas después aparece Cuevas con gafas de sol, las madreñas, liguero de suspensión y burlesque, falda regional y su camiseta “Asturies underground……” que se quitará como postre al final del concierto, dejando ver un cuerpo fibroso que cuida “yendo al monte, bailando y sobre todo cortando mucha leña”. Con tan sólo un acordeón diatónico, un ukelele y un pandero hila un espectáculo  de cuplé y cabaret con las tonadas y canciones populares de Asturias, fusionado con la música electrónica y mucho humor.

Le avalan 13 años de piano en el Conservatorio de Oviedo y su especialización en Sonología en la Esmu de Barcelona. Después de ese tiempo de formación “ya estaba cansado y me apeteció vivir la vida, formarme de una manera menos académica digamos, estudiar danza oriental y contemporánea y lo sigo haciendo”

Hace unos días estrenó un remix del Toro Barroso en “Siglo XXI”  y regresa de Barcelona con las mieles del éxito. El próximo 3 de Diciembre se sube al escenario del Teatro Alcalá de Madrid para cerrar temporada y también el  ciclo de  “Electrocuplé”, el espectáculo que puso en marcha hace dos años y que le ha llevado por toda España.

LA ENTREVISTA 

En verano ya estuviste en Madrid, en la fiesta del Orgullo Gay, cómo afrontas volver a Madrid.

De otra forma muy distinta al concierto del Orgullo, porque es en un espacio más grande como es el Teatro Alcalá  y además coincide con el fin de gira. Voy a hacer lo que quiera, pasármelo pipa, me lo tomo como un regalo para mí mismo y para el público que me siguió todo el año, y que sé que ese día van a ir también.

¿Cómo definirías tu espectáculo para aquellas personas que no te conocen? (que es raro)

Lo que yo hago es un poco difícil de explicar… (risas) les recomiendo que vengan  a verme porque lo que hago es una especie de performance folclórica, electrónica, sexy y muy llamativa… Doy muchas volteretas laterales cuando tengo espacio, y me gusta retozar mucho por el suelo, y con eso no hay quien se resista…(risas)

Cuanto de auténtico y cuanto de personaje hay en el Cuevas del escenario. Crees que funcionaría un Cuevas distinto, es decir, igual que la mayoría de l@s artistas?

Yo creo que no funcionara otro Cuevas diferente, porque pese a que es un personaje, yo no soy así todo el rato, sí hay una parte de mí él, es una multiplicación de mi persona,  es como si fuera un yo de anfetas.

Entre canción y canción vas contando historias en tono humorístico. ¿En qué o quienes te inspiras?  

Son todas historias mías excepto la del Cuento del Toro Barroso. Lo que narro son  cosas que me pasan a mí o imagino yo.

¿Quiénes son tus referentes humorísticos y musicales?

La gallega Mercedes Peón (cantante y gaitera folk), Lila Downs, Sara Montiel, Rocío Jurado, Concha Piquer, Lola Flores, el asturiano de música popular José González (“El Presi”), el etnomusicólogo estadounidense Alan Lomax. Respecto a los humorísticos, me encanta Lina Morgan, Faimino y Cansado, Martes y Trece.

¿Crees que los guiños humorísticos asturianos que haces en tu show pueden entenderse en otro sitio?

Seguro que hay algunos guiños asturianos que se entienden mejor que otros, pero siempre digo que igual que entendemos el humor andaluz, vasco, catalán, yo confío en que se entienda el humor asturiano más allá de las fronteras de Asturias.

RODRIGO CUEVAS

Verdiciu (2016)

¿En tu familia hay tradición por el folk? ¿Te cantaban canciones para dormir?

Sí, mis abuelos, mis tías y mi madre me cantaban canciones para dormir y a mí me encantaba. Una que me gustaba mucho era una que decía “en los álamos del rey córtame un ramito verde, verde te lo cortaré, córtame un ramito verde, de los álamos del rey. Y si el rey no te dejara de sus álamos cortar, córtame un ramito verde que los tiene el olivar.” Era la que más me gustaba.

¿Qué valoración haces de la gira de este año?

Estupenda, increíble no me la hubiera esperado, por el número de conciertos y el aforo.  Nunca había creado este espectáculo para un aforo tan grande como pudo ser la plaza mayor de Gijón, que se llenó de 4.500 personas y funcionó el show de maravilla en un sitio tan grande. La valoración que hago es muy buena, he tocado en multitud de sitios, desde el Festival de la Avutarda en Soria, al Teatro Filarmónica de Oviedo… en un montón de fiestas de Asturias…Habré hecho unos 100 conciertos esta temporada.

¿Cuáles son tus proyectos más inmediatos?

A principios de enero saldrá un videoclip y en marzo estrenaré nuevo espectáculo…

¿Cómo es un día normal en la vida de Rodrigo Cuevas? ¿A qué hora te levantas, te gusta madrugar?

Me gusta madrugar pero no lo practico todo cuanto yo quisiera… (risas) entre semana no me levanto antes de las 9. Mi vida es muy normal, limpio mi casa, cuido la finca donde vivo en un pueblo de Pontevedra, escucho música, veo muchos vídeos por internet y toco mucha música.