Como si de un sueño se tratase, ‘Sweety’
entra en tu cabeza y crees estar escuchando registros propios de primeras
figuras de la canción internacional. Y de una u otra manera así es ya que son
las voces de Ron Gidron y Marie Nielsen, su partenaire en un tema
que revolucionó la oficina TheBorderLineMusic
desde la primera vez que este músico de origen israelita llegó a ella, y
así nos lo han transmitido.
RON GIDRON
Sounds of the Heart (2014)
Tras una vida de idas y venidas por todos los
rincones del mundo, Ron Gidron,
decidió establecerse hace unos años en España (a caballo en Alicante, Madrid y
Granada) donde ya ha grabado dos trabajos discográficos publicados en 2003 y
2007 respectivamente.
Autodidacta del piano y la guitarra española, Gidron vuelca en sus composiciones
todas las experiencias adquiridas en eventos musicales por toda la geografía terráquea.
Festivales como Woodstock o
recitales canallas de tango en la intimidad de Buenos Aires. Todo cabe en el
legado nocturno que las musas han dejado a Ron
durante los diez últimos años y que se ha reflejado en sesenta temas
registrados en versiones instrumentales e idiomas como inglés, español o
hebreo.
LA
ENTREVISTA
¿Por qué Ron Gidrón elige la
música como profesión y no un trabajo más “normal”?
La música, y en especial la suerte de tener el don de componer,
escribir letras y además cantar, y poder compartir todo ello con terceros y
darles placer, es algo que me da una felicidad que
no me ha dado nunca ninguna otra ocupación
Es obvio que tu música tiene una
gran influencia de la música de autor, pero en la que pueden encontrar guiños a
otros estilos, como el Folk, el Rock, el
Swing y el Pop, sonidos algo retro que me recuerdan a las décadas de los 50, 60
y 70. ¿Qué ha motivado este sonido en el Ron Gidrón? ¿Cuáles son o han sido tus
influencias más directas a la hora de hacer música?
Lo primero es el hecho que he vivido en varios países, en los momentos
irrepetibles en los que la música de Folk, Rock y Pop han cogido fuerza con
artistas legendarios como Joan Baez, Bob Dylan, Los Beatles (por citar solo
algunos)… Es decir he vivido en directo los años 60 y 70. Sin duda la música Norteamericana
y Británica de aquellos años me ha influido. Pero también mis orígenes
familiares (Rusia, Oriente Medio) y posteriormente mis amistades musicales
(Latino Americanos) han dejado sus huellas en mis composiciones.
En tu último disco, Sounds of the Heart (2014) cantas
junto Marie Nielsen en castellano, hebrero e inglés, con las mayoría de
canciones con un aire melancólico pero optimista, sonido nostálgico pero
luminoso, melodías evocadoras y sentimentales, donde tratas temas reflexivos, canciones
de amor (…ya casi no se hacen canciones de amor), de relaciones personales, donde
no solo le has dado importancia a las melodías, sino también a las letras… ¿Qué
puedes decirnos al respecto? ¿Qué te inspira a la hora de hacer tus canciones?
Primero quiero aclarar que debido a mi voz más bien baja de Barítono,
me suelo acompañar en dúos con cantantes femeninas de voz alta. En el disco
citado, son 4 diferentes (por razones puramente coyunturales). La más presente
es Ainhoa Ortega, que mejor armoniza con mi
voz y además canta estupendamente
en InInglés
Jasmina Petrovic (Croata y ppolíglota
y Mª José López, son las dos cantantes profesionales a las que he
recurrido cuando Ainhoa no pudo grabar
- y lo han hecho estupendamente bien.
Marie Nielsen solo está presente en una canción (Sweety) porque no vive en
España, y fue una suerte poder contar con su preciosa voz y la forma personal
de cantar en Inglés.
En cuanto a mi estilo – aunque variado, es ante todo muy melódico, se
inspira en vivencias propias o de personas cercanas, historias mas bien
cotidianas, pero eso sí – muy sentimentales porque yo lo soy (a pesar de ser ingeniero
de profesión). Para mí, por suerte, la familia, amistades y relaciones
interpersonales, son la fuente de felicidad y de inspiración (junto a la
naturaleza – a la que he dedicado varios temas – en este CD: Brisa, Ondas
Siderales).
Como soy optimista por naturaleza, la nostalgia o melancolía siempre
quedan iluminadas por la alegría de vivir… Mi proceso creativo es raro: Empieza
con la melodía (casi siempre en sueños de madrugada), le sigue un titulo (que
orienta las letras) y después ya desarrollo las letras completas, con mas
tiempo y dificultad, buscando las palabras y rimas en un idioma que no es mi
lengua materna…
¿Por qué has titulado Sounds of the Heart a este último álbum?
Esto es fácil de explicar: Justo cuando publiqué mi trabajo anterior
(OMBO) pasé un momento delicado por un problema de salud con el corazón (que de
hecho, me impidió cantar durante un par de años) – que afortunadamente superé y
me recuperé.
Esto me dio la idea del nombre, que en mi Web musical existe también en
versión española (Sonidos del Corazón)- y por supuesto también porque mis
canciones hablan mucho de sentimientos – de los que el corazón es un símbolo.
El sonido, la producción,… todo
suena a grandes pretensiones ¿Qué expectativas has puesto en este trabajo? ¿Qué
esperas de él?
Quizás porque soy una persona muy pragmática, me he centrado en
producir el mejor sonido posible con unos medios aceptables pero limitados, con
el fin de dejar un legado bonito, de música independiente, de autor, pero con
calidad y que pueda gustar a mucha gente (sin ser comercial). Soy conciente de
lo difícil que es darse a conocer en este momento, y más aun de rentabilizar la
música, así que no me he fijado grandes metas que pueden ser inalcanzables.
Lo que sí pretendo es divulgarlo al máximo, intentar conseguir que
artistas consagrados
se fijen en algún tema mío y lo hagan suyo – y quizás conseguir así
algún éxito comercial y a partir de allí – quien sabe… también esto intentando
entrar con melodías mías en la banda sonora de alguna película (de momento no
puedo dar más datos).
¿Cuáles son los planes de Ron
Gidrón para lo queda de 2014 y primeros de 2015? Suponemos que girar el disco
por salas y festivales, ¿pero algo que puedas adelantarnos? ¿Eventos
importantes? ¿Para cuándo nuevas canciones?
Este CD incluye “solo” 18 temas de mas de 45 que tengo grabados y
listos para publicar (y bastantes de ellos existen en varias versiones de
idioma, instrumental etc…). O sea que material no me falta… Así que tengo
varios proyectos en marcha, a saber:
Estoy elaborando un CD triple llamado “Ébano y Marfil” (en Inglés Ebony
& Ivory) con 78 estudios para piano (nivel 1,2 y 3er año) compuestos por
mi. Aún no sé si será físico o solo virtual (lo que se estila ahora…).
También está en preparación un CD doble llamado “Alma en Calma” – demás
de dos horas de música instrumental
super-relajante y agradable de escuchar (como fondo para leer, masajes…).
Estará en versión digital para fin de año.
Para 2015, espero prepara un CD doble llamado “Barra y Espejo”, para acompañar ejercicios de Clases de Ballet para nin@s grandes y pequeñ@s.
La promoción en directo es una asignatura pendiente que depende de las
colaboraciones con gente metida en este mundo. Lo estoy intentando, con la
dificultad añadida de que soy más bien un cantautor que necesita acompañamiento
– pero que no tiene un grupo estructurado… Es mucho más viable solucionar esto
a nivel estudio, que en giras o actuaciones directas.
¿Crees que el mundo digital va a
acabar con el mundo de la música tal y como lo conocemos hoy? ¿Cuál es el
futuro del músico?
Creo que aún es pronto para sacar una conclusión definitiva. Sin duda
se vende mucho menos música que antes, y además, las discográficas de antaño –
que te facilitaban el camino (cobrándolo, claro), ya no existen como tales… Eso
obliga a uno aprender a moverse por sí mismo, y eso no es nada fácil.
Es cierto que cualquiera puede colgar sus creaciones por Internet. Pero
quedan perdidas entre millones de canciones, y parece más difícil todavía tener
éxito, salvo que tengas la suerte de que alguien importante se fije en tus
temas… y esto es muy improbable.
La música es una necesidad básica del ser humano – y en mí modesta
opinión algo esencial que le hace diferente a las demás especies… Así que la
música nunca morirá. Pero vivir de la música es otra cosa, reservada a unos
pocos y en base a muchos sacrificios de todo tipo.
Viendo el panorama del fin de
semana en cada ciudad, con una grandísima oferta de conciertos, ¿es cierto que
parece que hay una nueva era dorada de los directos?
Sin duda el directo es en este momento, una necesidad, si la cual es
casi imposible lograr reconocimiento o éxito. Es una ventaja para los
consagrados, y un precio a pagar por los desconocidos, pasando por muchas
actuaciones en garitos – a menudo sin cobrar casi nada, y actuando ante muy
poco público. Allí mueren muchos sueños e ilusiones de los que no logran
superar esta fase… Ser un músico del montón, no te lleva a ninguna parte, pero
aún así es una satisfacción personal ser músico…
¿Cuál ha sido tu mejor
momento/recuerdo en la música?
Como compositor, fue el momento en que descubrí que era capaz de crear
temas nuevos, originales, con estilo propio, y hacerlo una y otra vez hasta
tener material suficiente para editar un primer CD (doble, llamado “Príncipe
del Mar”) – y luego sorprendentemente, continuar componiendo a lo largo de los
13 años que llevo haciéndolo. Digamos que fue el momento en que descubrí que
las (putas – como dice Sabina) musas, me visitaban de madrugada, y me vuelven a
visitar de vez en cuando (nunca sabes hasta cuando…)
¿Tienes alguna opinión de la
actual situación de España y del mundo en general, que quieras compartir con
nosotros?
Creo que la música debería estar más presente en la educación y en la
vida, y seguramente iniciativas como las de Daniel Barenboim (con la orquesta
de Palestinos e Israelíes) podrían hacer que en este mundo haya más felicidad y
menos conflictos y tragedias.
MISCELÁNEA
¿Podrías recomendarnos…
...un libro?:
El perfume (Patrick Süskind)
...una película?:
2001 Odisea de Espacio (Stanley Kubrick)
...una canción?:
Mediterráneo (Joan Manuel Serrat)
...un
album?:
Desire (Bob Dylan 1976);
The Wall (Pink Floyd 1979)
...un grupo o solista?:
The Beatles (son únicos e irrepetibles)
...una afición?:
El mar y todo lo que le rodea: Bucear, navegar, windsurf, conchas…
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