Formado por María Martínez Ayerza (flautas dulces),
Petri Arvo, bajón (fagot barroco y
flautas dulces) y Petros Paukkunen (órgano),
Audi Alteram nace para promover uno
de los repertorios más innovadores y valiosos de la historia de la música
occidental: el Stylus Phantasticus.
Este estilo de
música instrumental del siglo XVII se caracteriza por la utilización de una
variada paleta expresiva, grandes contrastes y una libertad compositiva
desconocida hasta el momento. Alrededor del año 1600, los instrumentos
musicales encontraron un vocabulario propio. Pasajes altamente virtuosos,
tiratas, trinos, acentos, escalas, cromatismo... son recursos abstractos con
los que construir una narrativa musical similar a la de los textos de la época.
El conjunto se ha
presentado, entre otros, en la Academia de Organo “Julián de la Orden” de
Cuenca, el Festival de Verano de Oviedo y el Festival Internacional de Santander.
El próximo 25 de
Julio a las 20:00 podremos disfrutar de su concierto “En torno al órgano” con
música de cámara y para órgano solo entre el Renacimiento y el Barroco, en la Catedral de Segovia, abriendo la 47 Semana de Música de Cámara del Festival
de Segovia.
LA ENTREVISTA
¿Cómo y por qué surge Audi Alteram? ¿Por qué un grupo de música barroca?
El
grupo como tal es de formación muy reciente (2015) y el nexo de unión es Petri,
nuestro fagotista, que había trabajado con Petros y conmigo con anterioridad.
Los tres tenemos un especial interés en el repertorio de los siglos XVI y XVII
y por ello decidimos centrarnos en la música de este periodo.
¿Qué caracteriza la música de Audi Alteram de otras formaciones de este estilo?
Quizá,
nuestra intención de subrayar el carácter expresivo, elocuente, de la música
instrumental del barroco temprano, y de hacer lo posible para alcanzar esa
expresividad con instrumentos de viento. El bajón y la flauta dulce tienen un
ámbito y una dinámica que a priori son más limitados que los del violín o la
viola da gamba pero a nosotros nos gusta explorar las posibilidades de esta
formación.
¿Cómo es ser músico profesional? ¿Cuántas horas
diarias se pueden llegar a dedicar al estudio? ¿Cuál es el panorama actual para
un músico de orquesta, de cámara o solista?
La
vida de un músico profesional es irregular, con periodos de mucho ajetreo
(viajes, conciertos, cursos) y otros quizá más calmados pero en los que hay que
preparar nuevos proyectos. Es un privilegio poder llevar esta vida, pero
también hay que saber organizarse bien. Por supuesto el estudio y los ensayos
requieren su tiempo, pero también otros aspectos: buscar repertorio, preparar
programas, escribir notas al programa, promocionarse...
Yo
llevo ya casi quince años compaginando la interpretación, la docencia y otras
actividades en un campo bastante marginal, la flauta de pico, y estoy muy
agradecida por todas las oportunidades que se me han presentado. Quizá el
secreto para conseguir desarrollar una carrera profesional es tener mucha
paciencia, desarrollar la capacidad de invertir constantemente para seguir
mejorando y aprender a vivir con un cierto grado de "incertidumbre"
económica a medio plazo. Para mí, esa incertidumbre, mirar la agenda y ver que
en un año o año y medio no hay más conciertos, es un gran estimulante para no
"relajarme" demasiado y seguir con la mirada puesta en el futuro.
A parte de una excelente técnica y posición ¿qué tiene
un músico excelente sobre el escenario?
Creo que un músico excelente es un músico elocuente, es
decir, alguien que sabe exactamente lo que quiere comunicar y
tiene las herramientas adecuadas para hacerlo. En música, la comunicación a
veces es abstracta, puramente formal, a veces más profunda y emocional, pero
está siempre presente: del músico al público y del público al músico. Y quizá
los mejores músicos son aquellos que consiguen involucrar al oyente, absorber
su atención, fascinar, conmover. Esto es algo que va más allá de lo técnico, no
de por sí la interpretación más perfecta o la obra más compleja técnicamente es
la más conmovedora o impresionante.
Muchas veces oímos que el instrumento es un órgano más
del músico ¿qué piensas al respecto?
Yo
quizá definiría el instrumento como la voz del instrumentista. A través del
habla nos comunicamos con nuestro entorno desde la infancia e incluso pensamos
a través del lenguaje, con nuestra propia "voz interior". Un
instrumentista encuentra su "voz artística" en un instrumento
determinado, o en varios, que se convierten en su canal de comunicación y
también en una parte inherente de su identidad y su personalidad.
¿Cómo se transmite sin hablar con palabras en un
concierto?
En
un concierto hay muchos tipos de comunicación. Por ejemplo, en la música de
cámara hay una interacción entre los miembros del grupo que en muchos casos
incluye reacciones espontáneas. Cuando ocurre algo mágico en el momento, el
público siempre lo reconoce y aprecia. En este sentido, un oyente suele estar
mucho más "enganchado" al concierto cuando nota que existe esta
espontaneidad que cuando cada momento está planificado al milímetro.
El
proceso de "conmover" a un oyente es siempre misterioso. Cincuenta
oyentes en un mismo concierto pueden experimentar sensaciones muy diferentes.
Hace poco un amigo músico me contó una anécdota: había acudido a un concierto
del que esperaba mucho y le dejó más o menos indiferente. Al día siguiente, en
el coche, puso la radio y se quedó fascinado e impresionado con la música que
transmitían. Al final, resultó ser el mismo concierto... Para mí, esta es una
de las realidades más interesantes de la música: para cada oyente, su
experiencia es única e íntimamente conectada con un momento determinado e
irrepetible.
¿Hay diferencias entre un músico profesional dedicado
a la música clásica y un músico profesional dedicado a la música ligera?
No
me atrevería a generalizar en este sentido. Cada práctica musical tiene sus
características, pero en el fondo yo diría que todos los músicos nos parecemos
y que podemos aprender de compañeros que se dedican a otros géneros musicales o
que tienen un punto de vista musical opuesto al nuestro.
En muchas ocasiones se echa en falta la presencia de
público joven en los auditorios ¿Por qué ocurre esto? ¿Qué se puede hacer?
Creo
que fundamentalmente es una cuestión de prejuicios. Muchos jóvenes quizá
sienten que la música antigua no les pertenece, no está relacionada con su
propio mundo. Sin embargo, los grandes temas del arte del pasado siguen siendo
actuales. El amor, por ejemplo, en todas sus vertientes, puede ser el más
obvio. También hay que recordar que muchas prácticas musicales del presente,
como la improvisación, tienen paralelos en la música del pasado. Otro tema
distinto es la asociación de la música clásica o antigua con la élite social o
con comportamientos y convenciones anticuadas (decimonónicas en su mayoría).
Por suerte, esto se va diluyendo poco a poco.
¿Puedes contarnos alguna anécdota en algún concierto?
¿Cuál es el sitio más exótico donde habéis actuado?
Para
mí fue bastante inolvidable un concierto con un grupo de 13 músicos. El
concierto lo organizaba una asociación de psiquiatras como cierre de un
congreso acerca de la depresión. Todo salió bien y llegó el momento de dar una
propina. El director del grupo contó al público que dos de mis compañeras
abandonarían el conjunto después de ese concierto, y se emocionó tanto que se
le cayeron unas lágrimas. Y acabamos los 13 llorando mientras tocábamos la
propina. Con 125 psiquiatras en el público, por suerte...
En
cuanto a sitios exóticos, quizá la palabra no se ajuste del todo, pero por
ejemplo he actuado en el mirador de la torre más alta de Amsterdam, que hasta
hace unos años era la sede de Shell, la compañía petrolífera. También en el
planetario del Museo de la Ciencia de Cuenca. Y en la Real Bodega del Cortijo
de San Isidro, cerca de Aranjuez, que tiene una acústica realmente especial.
Quizá sea exótico decir que también he dado más de 1200 conciertos (de 15 o 20
minutos) para niños de entre 0 y 4 años en guarderías de la ciudad de
Ámsterdam. Me las conozco todas...
¿Cuáles son vuestros planes para el resto del 2016 y
comienzos del 2017? ¿Algún concierto importante? ¿Festivales? ¿Salidas al
extranjero? ¿Nuevas grabaciones, quizás?
Audi
Alteram tiene una agenda tranquila ya que vivimos en países diferentes y de
momento actuamos juntos principalmente en verano. En enero del 2017
participaremos en el festival Aurore en Helsinki, en un concierto en el que
también estarán implicados otros músicos. Con nuestros otros grupos, sí que
tenemos una agenda más intensa de conciertos y grabaciones.
¿Creéis que el mundo digital va a acabar con el mundo
de la música tal y como lo conocemos hoy en día? ¿Cuál crees que es el futuro
del músico?
Creo
que ese proceso ya ha sucedido, está en la mentalidad de la gente que la
música, y la cultura en general, es gratis y accesible las 24 horas del día.
Por otro lado, las redes sociales y las plataformas digitales nos permiten
estar en contacto directo con público de todo el mundo. En mi opinión, no hay
que resistirse a ciertos cambios que están teniendo lugar en la industria
musical, pero sí informar e incluso educar desde la infancia y juventud para
que el esfuerzo y la inversión que supone hacer un disco o dar un concierto se
valore más. Y que esa valoración se traduzca en nuevas formas de apoyo
económico a la cultura: desde subvenciones a patrocinios privados como el
micromecenazgo.
¿Cuál ha sido vuestro mejor momento / recuerdo
en la música?
Es
difícil escoger, pero un momento que para mí fue muy especial fue mi primer
concierto en los EE.UU. Fue en Boston con The Royal Wind Music. Cuando ya
estaba terminando el concierto, tocamos un coral de Johann Sebastián Bach.
Cerca del final hay una cadencia muy especial que termina con un acorde
totalmente inesperado. Y cuando tocamos ese acorde todo el público exclamó,
"ooooohhhhhhhh". Esa respuesta del público me emocionó.
¿Tienes alguna opinión de la actual situación
económica y social de España y del mundo en general que quieras compartir con
nosotros? ¿Cómo ves el futuro de los artistas?
El arte es necesario para
ser feliz, canalizar nuestros sentimientos, entretenernos, formarnos,
desarrollar habilidades, expresarnos, acercarnos a los demás, educarnos...
Mientras haya humanidad, habrá arte. Y cuanta más arte y cultura, mejores
personas seremos. Espero que desde los gobiernos e instituciones (a todos los
niveles: locales, regionales, nacionales, mundiales) se fomente la cultura. ¿De
qué nos servirá llegar a los 120 años de vida si no tenemos nada que la llene?
MISCELÁNEA
¿Podríais decirnos…
...un libro?:
"El
ángel de Ámsterdam" de Geert
Mak
...una película?:
"El
gran dictador" de Chaplin
...una obra?:
"Nymphes
des boys" de Josquin
Desprez, un lamento compuesto en honor de Jean Ockeghem, al que admiraba
...un álbum?:
"The Passion of Reason" de
Sour Cream
...un solista?:
Jérémie Papasergio, un fagotista fantástico,
virtuoso y elocuente
...una afición?: El ajedrez
…cordero o cochinillo? (es que somos de Segovia ☺):
Entonces ¡los dos!
Gracias por todo y encantados de hablar con vosotros.
¡Gracias a ti!
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