EL GRUPO
En julio de 2000,
conmemorando el 250 aniversario de la muerte de J. S. Bach, Hippocampus
llevó a cabo en Londres su primer concierto, un tributo a este autor que
consistió en una selección de su música instrumental y de arias de sus
cantatas. Desde entonces Hippocampus
ha venido difundiendo su compromiso con el público en diversas ciudades de
Inglaterra, Alemania y España, participando en importantes ciclos y festivales
y teniendo siempre como premisa el hallazgo de la emoción en las partituras.
Bajo la dirección de Alberto Martínez
Molina, Hippocampus fue
residente en el ciclo madrileño de Las
Cantatas de J. S. Bach, en el que desde 2004 hasta 2012 se interpretaron
todas las obras religiosas de este compositor, de quien la formación tiene en
repertorio más de setenta Cantatas además de Misas, Pasiones, Conciertos de
Brandemburgo, Suites orquestales y música de cámara. Su particular culto a la
música de Bach ha llamado la
atención de artistas como Richard Egarr
o Christophe Coin, que han sido
invitados con frecuencia a dirigir y a tocar con el grupo.
Si bien es cierto que la música del cantor de Leipzig ha venido siendo el epicentro del entusiasmo de Hippocampus, no lo es menos que esta formación sabe dar primicias interpretativas de otros muchos compositores de calidad, haciendo del sello discográfico Arsis el lugar de encuentro de sus ya numerosas grabaciones: el op.2 de Johann Philipp Krieger (4* Goldberg); “Les Goûts Réunis”, junto al violinista Jaap Schröder, “Lasciatemi morire”, con música de Caccini, Frescobaldi y Monteverdi; “Sonatas de un oboísta”, de G. Sammartini (con Xavier Blanch, Premio CD Compact 2010 a la mejor grabación instrumental barroca), y varias grabaciones en directo, editadas en 2009 en CD (Cantatas BWV 82, 170 y 199) y desde 2012 en pendrives GPD de 8 GB con audio y vídeo en alta definición: “Liebster Jesu” (2012, Excepcional Scherzo y nominado a los ICMA 2014, categoría “Baroque Vocal”), “Bach en Vallekas” (2013, Excepcional Scherzo y Ritmo Parade) y otros en fase de postproducción. Estas innovadoras grabaciones incluyen nueve cantatas y dos conciertos de Brandemburgo de J. S. Bach, además de música de cámara de Telemann, Haendel y Vivaldi.
LA ENTREVISTA
¿Cómo y por qué surge Hippocampus? Surge por
amor a la música y por afinidad entre sus integrantes. Compartíamos admiración
por la música de Johann Sebastian Bach y una misma y respetuosa actitud ante
nuestra profesión. ¿Por qué un grupo de música de cámara?
Hippocampus
nació como grupo de cámara, pero en los 14 años que llevamos juntos hemos
llegado a ser una orquesta de casi cincuenta músicos. La relación entre nosotros,
aún siendo muchos, siempre hemos intentado que sea cercana, camerística,
cómplice… que nadie se sintiera uno más o de relleno.
¿Qué caracteriza la música de Hippocampus?
Hacemos
música que nos apasiona, la música por la que nos hicimos músicos: la de J. S.
Bach, la de Haendel, la de Monteverdi, la de Cabezón… y música de gran calidad
de otros muchos autores menos conocidos, para ayudar a que dejen de serlo:
Sammartini, Krieger…
¿Cómo es ser músico profesional?
Si
te gusta la música, y si tienes talento y suerte, es un privilegio. Ganarte la
vida haciendo lo que amas lo es.
foto de Ana Álvarez Prada
¿Cuántas horas diarias se pueden llegar a dedicar al estudio?
Eso depende de la edad, de las circunstancias, de las ambiciones, del repertorio que uno se marque como objetivo. El músico que no estudia y no toca todos los días pienso que se debe de sentir extraño, es como si estás todo un día sin hablar con nadie aunque tengas oportunidad y te apetezca. Ahora, si estudias una hora o estudias ocho al día depende de todo lo anterior.
¿Cuál es el panorama actual para un
músico de orquesta, de cámara o solista?
Entre
desolador y desesperante, aunque hay a los que les sigue yendo muy bien, porque
aunque la cultura sea la Cenicienta para los gobiernos que se enfrentan a
crisis, siempre hay grandes estrellas y mitos vivientes que siguen dando cientos
de conciertos y a los que se les sigue bailando el agua. España es país de
estrellas y mitos vivientes o de jóvenes promesas, no hay lugar para el músico
maduro, normal, competente, no ungido por el óleo de la genialidad, a veces
inventada por el público, por la crítica, por los programadores… Pasa lo mismo
en la ciencia y en la investigación. Y se recibe el mismo apoyo.
Aparte de una excelente técnica y
posición ¿qué tiene un músico excelente sobre el escenario?
La
capacidad de transmitir y compartir emociones con quien quiera y sepa escucharle.
foto de Ana Álvarez Prada
En más de una ocasión oímos que el instrumento es un órgano más del músico ¿qué piensas al respecto?
Para los cantantes esto es un hecho. Y es verdad que los instrumentistas nos pasamos la vida imitando al canto. El instrumento es una herramienta a través de la cual nos expresamos. Y está hecha de madera, de tripas, de crines, de cañón de pluma, y también de metales. Algo de orgánico tienen, sin duda, hay mucha materia que fue materia viva. Está bien la imagen y el símbolo, pero no perdamos de vista que, en todo caso, el instrumento es la herramienta, no el producto final.
¿Cómo se transmite sin hablar con palabras en un concierto?
Supongo que si esto fuera explicable con palabras igual la música instrumental correría peligro y perdería sentido. Que proporciones, dinámicas, frecuencias, timbres sonoros, armonías, melodías y ritmos… puedan ponernos tristes, iracundos, melancólicos o eufóricos sigue siendo un misterio y un enigma y se sigue investigando: hay mucho neurólogo y neurobiólogo con formación musical que tiene estos asuntos en su agenda. Me interesa muchísimo y algo he leído, pero me sigue gustando más intentar llevarlo a cabo que dar con las explicaciones: los músicos queremos ser magos y nos aprendemos trucos cuya explicación profunda no conocemos… tenemos que ser humildes y admitirlo.
¿Hay diferencias entre un músico
profesional dedicado a la música clásica y un músico profesional dedicado a la
música ligera?
Las
barreras están cada vez más difuminadas, y de hecho yo no sabría definir bien ni
música clásica ni música ligera, son ya cajones de sastre demasiado grandes. Te
diría que hay diferencias entre músicos que se dedican a lo mismo, así que
imagínate entre músicos que se dedican a cosas diversas: o igual te encuentras
a dos que, dedicándose a cosas distintas, son iguales en su actitud y
disposición.
¿Puedes contarnos alguna anécdota en
algún concierto?
En
2012 nos dirigieron en Berlín una Pasión según San Mateo de JSBach, y para
nuestro concierto el director usó la batuta que había usado Mendelssohn cuando
redescubrió e interpretó esta monumental obra en 1829.
¿Cuál es el sitio más exótico donde
habéis actuado?
Me
encantaría haber tocado en muchos sitios exóticos, pero me temo que salvo una
sala de yoga y un gimnasio… eso sí, lugares de imponente belleza arquitectónica
o importancia histórica ya van muchos (San Juan de los Caballeros es uno, sin
duda)
foto de Ana Álvarez Prada
En muchas ocasiones se echa en falta la
presencia de público joven en los auditorios ¿Por qué ocurre esto?
En
realidad, en la música a la que me dedico, la música barroca, la música
antigua, esto no sucede… pero en música clásica en general sí parece el caso. Tanto
frac, tanta seriedad, tanto snobismo… hace huir a las generaciones jóvenes. A
ver si en este siglo XXI se nos pasan determinadas actitudes del XIX y del XX,
que seguimos padeciendo.
¿Qué se puede hacer?
Que
la música esté presente en la educación obligatoria, que se apoyen las escuelas
de música en ciudades y pueblos, para que todo el que quiera pueda aprender, no
sólo el que quiera dedicarse profesionalmente. ¿Para qué formar a músicos si no
creamos un público? Si educamos al público, éste también decidirá pagar una
entrada para un concierto, no sólo para un partido de fútbol, y con el dinero
de esa entrada podremos ayudar a financiar el concierto mismo. Que exista el
producto, que exista el consumidor, y el mercado funcionará. La otra opción es
lograr que no haya ni público ni profesionales ni cultura, y que España sea, si
cabe, aún más paleta e inculta. Para un país con la tasa de turismo que tiene
el nuestro (el turista podría venir a mil lugares con interés histórico,
arquitectónico, meteorológico, playero, y musical también), no apoyar activamente
la cultura es una decisión política digna de mastuerzos.
¿Qué podemos disfrutar en uno de vuestros
conciertos, como por ejemplo, en el próximo que vas a ofrecer próximo martes 15
de Abril, en Segovia?
De
la música de uno de los más grandes compositores de la historia: Johann
Sebastian Bach.
¿Cuáles son vuestros planes para el resto
del 2014 y comienzos del 2015? ¿Algún concierto importante? ¿Festivales? ¿Salidas
al extranjero? ¿Nuevas grabaciones, quizás?
Los
planes más próximos son que el próximo mes de junio ofreceremos el concierto de
clausura de la XXI edición del Festival de Música Antigua de Aranjuez (domingo
día 8). Y el domingo día 22 de junio interpretaremos en Berlín, invitados por
la Sociedad Bach berlinesa, el Oratorio “Los israelitas en el desierto”, de CPE
Bach, de quien el pasado 8 de marzo se cumplieron 300 años desde su nacimiento.
Para la próxima temporada actuaremos en el Auditorio Nacional de Madrid y en el
Auditorio de León para el CNDM del INAEM. También estamos a punto de sacar
nuestro noveno álbum con la discográfica Arsis: editado en Pendrive de 8GB y
con videos en FullHD, saldrá durante este 2014 “PARENT(H)ESIS”: música de
cámara de Telemann, Vivaldi, Haendel y Bach, en formación de cuarteto.
HIPPOCAMPUS
Trailer de PARENT(H)ESIS. Música en imágenes. Hippocampus y
Noah Shaye.
Música de Haendel, Telemann, Vivaldi y Bach.
¿Creéis que el mundo digital va a acabar
con el mundo de la música tal y como lo conocemos hoy en día?
Si
el melómano usuario sigue opinando que tiene derecho a escuchar y poseer gratis
todo lo que se le antoje, vamos muy mal. Si lográramos convencerle de que,
igual que se compra un café o un helado, pagara una cantidad moderada, no
hinchada, por la música que quiere escuchar, tenga o no soporte físico… Y si
buena parte o toda esa cantidad fuera a gente que se la hubiera ganado de
verdad por hacer bien un trabajo: el compositor, el intérprete, el productor, el
distribuidor, el vendedor… de forma equilibrada, racional, transparente. Hace
no tanto, y en el caso de la música clásica, era nada el compositor, un porcentaje
ridículo o inexistente el intérprete, poco el productor (ya se arruinaron
tantas discográficas, incluidas las grandes…), mucho el distribuidor (y aún así
tantas distribuidoras cerraron…) y mucho el vendedor (pero ninguna tienda vive
de vender música clásica, eso está claro)
¿Cuál crees que es el futuro del músico?
Del
laboral no tengo ni idea. Confío en que no sea muy oscuro.
¿Cuál ha sido vuestro mejor momento / recuerdo
en la música?
Completar,
en diciembre de 2012, junto a otros muchos grupos españoles, la interpretación,
durante más de 9 años, de toda la obra sacra vocal de Bach: todas sus cantatas,
motetes, misas, oratorios, pasiones… por las iglesias de Madrid.
¿Tenéis alguna opinión de la actual
situación de España y del mundo en general, que queráis compartir con nosotros?
Si
ya es penoso describir lo que está pasando, imagínate opinar. Siendo padre de
dos hijos muy pequeños, sigo luchando día a día para vencer al pesimismo. Y en
muchas ocasiones soy pesimista respecto a mi posible victoria. Pero en otras,
pienso que las grandes crisis han servido siempre para evolucionar hacia algo
mejor. Destruir para crear algo nuevo. No sé si yo lo veré, ojalá mis hijos sí.
Trailer del álbum Bach en Vallekas (2013), editado en
PenDrive GPD por Arsis.
MISCELÁNEA
¿Podríais decirnos…
...un libro?:
Corazón
tan blanco (2003) de Javier Marías.
...una película?:
Toy
Story 3 (2010) de Lee Unkrich y otros cuantos genios de Pixar.
...una obra?:
La
Pasión según San Mateo (1727) de J.S. Bach.
...un
álbum?:
A Night at the Opera (1975) de Queen.
...un solista?:
Dinu Lipati, pianista.
...una afición?:
La
gastronomía.
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